EL PARLAMENTO FRENA LAS DIRECTRICES DE REMENTERIA PARA EL FUTURO URDAIBAI

Reportaje
 
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Significativo varapalo del Parlamento de Gasteiz a las directrices promovidas por Unai Rementeria para el futuro Urdaibai. Un año después de que Lakua aprobase por decreto, dos días después de las elecciones, el Plan Rector de Uso y Gestión de la reserva de la biosfera, la Cámara, por unanimidad, insta a que se elabore uno nuevo tomando en consideración criterios medioambientales.
 
GARA / Agustín GOIKOETXEA


La Cámara de Gasteiz instó el jueves pasado de manera unánime al Ejecutivo Urkullu a que, en un plazo no superior a un mes, emprenda la elaboración de un nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, «tomando en consideración los planteamiento de los agentes medioambientales». Los ecologistas presentaron en enero un recurso ante el TSJPV, que fue admitido a trámite en marzo, contra el decreto que Lakua aprobó en setiembre de 2016, dos días después de los comicios autonómicos.

Esa maniobra fue atribuida al por entonces viceconsejero de Medio Ambiente, Josu Madariaga, en sintonía con los planes que defiende el diputado general de Bizkaia para ese espacio natural privilegiado pero al mismo tiempo amenazado, según advierten los ecologistas. Unai Rementeria propugna proyectos muy controvertidos en Busturialdea como son el polígono industrial de Muxika, la implantación del Museo Guggenheim en Sukarrieta o la segunda fase de los túneles de Autzagane.

El asunto fue llevado ante los tribunales por la plataforma Urdaibaietz, confiada en que los jueces le iban a dar la razón y forzar a la redacción de un PRUG que inspire un modelo de desarrollo «ambientalmente sostenible y socialmente justo». Paralelamente, la iniciativa fue presentada para su debate en el Parlamento por EH Bildu y Elkarrekin Podemos, siendo transaccionada con PNV y PSE, sumando el apoyo en la votación del PP. Los socios de los jeltzales, que dirigen ahora la viceconsejería de Medio Ambiente, apuestan por «abrir el debate real que necesita la reserva, potenciando los procesos de participación y, en especial, facilitando la de los agentes de la comarca y de la comunidad científica en el proceso».

Urdaibaietz califica el pronunciamiento de «importante paso positivo» y «una nueva oportunidad» para «revertir los riesgos de cambios irreversibles» que suponía el PRUG de 2016; por ejemplo se reducía la superficie de suelo protegida. Tras emplazar al Gobierno a que «en el plazo más breve posible» haga efectiva la proposición no de ley, llaman a los ayuntamientos implicados y a la Diputación a que «desistan» de aplicar las directrices del plan cuestionado.

La plataforma ecologista inciden en el caso de los consistorios, que amparados por el PRUG, han comenzado a revisar sus planes urbanísticos. Les requieren a que «se abstengan de incluir en ellos la colonización y artificialización de los suelos ‘no urbanizables’ protegidos por la Ley de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai o por la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad», permitiendo áreas de fondeo de embarcaciones ilegales o «chiringuitos» que han ido proliferando gracias a una actitud permisiva.

Estudio de impacto ambiental


Quienes llevan años alertando de las irregularidades, reclaman que el nuevo PRUG sea sometido a la «previa y obligatoria» Evaluación Conjunta de Impacto Ambiental, no como sucedió en 2016. La plataforma Urdaibaietz recuerda la directriz de que la conservación de los valores naturales de Urdaibai debe de ir unida necesariamente al desarrollo de los recursos sociales, culturales y económicos concurrentes.

Indican que la administración se ve así obligada a elaborar, aprobar e implementar la Agenda Comarcal 21 y Plan Estratégico de Desarrollo Sostenible de Urdaibai (PADAS) para dirigir un proceso de desarrollo socio-económico «ordenado e integrado» con la naturaleza de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. «El PADAS en vigor, aprobado en 1998, apenas ha sido aplicado, y necesitaría una revisión y actualización, así como el compromiso de las instituciones para el impulso de un modelo de desarrollo compatible con la conservación», advierten.

La plataforma defiende la participación «real y efectiva» en los procesos de toma de decisiones de la ciudadanía y de las ONG en las que se agrupan. En este sentido, estiman que «es necesario el estímulo de la participación para mantenerse apegada al valioso territorio en el que se asientan sus valores culturales y su propia vida».

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